Explorar las cercanas Pozas de Langre y disfrutar de la naturaleza circundante es una excelente opción para un día de aventura después de un desayuno sencillo.

Encanto y vistas maravillosas

La posada tiene un ambiente acogedor y elegante. Disfruté de un desayuno en la terraza con vistas increíbles, y la atención del personal fue excepcional, ¡siempre sonrientes y dispuestos a ayudar!

cerca de hermosas playas y parques tranquilos para pasear

mi estadía en este hotel fue genial ya que estaba a solo 15 minutos a pie de la Playa de Loredo y a un corto paseo de las Pozas de Langre, perfectas para disfrutar de la naturaleza y hacer caminatas tranquilas.

El jardín cerrado fue genial para que mi perrita jugara, y la cama era tan cómoda que dormí como un bebé.

me sentí completamente relajado, no tengo ninguna queja en absoluto

Disfruté mucho de la habitación con su pequeño jardín, perfecto para que mi perro jugueteara. Las vistas desde el jacuzzi eran impresionantes, y la cercanía a la playa de Langre permitió que tuviéramos muchos momentos divertidos. Algunas cosas a mejorar, pero en general, lo pasamos genial.

La ubicación es excelente, cerca de la playa.

El estado de la habitación era deplorable. La ducha estaba llena de moho y no funcionaba correctamente la alcachofa. El desayuno era extremadamente pobre y demasiado caro para lo que ofrecía. pagamos 9 euros por un servicio que podría considerarse una broma.

El jardín cerrado fue genial para que mi perrita jugara.

Habitación cómoda, con un jardín pequeño que encantó a mi perro. La ubicación bien chida, a un paso de la playa de Langre y cerquita de Somo para ir a cenar lecker. Perfecto para desconectar y relajarse un rato.

La habitación era más acogedora que un abrazo de abuela en invierno, equipada con una bañera de hidromasaje que transformaba cada baño en un spa personal. La terraza tenía vistas que hacían que hasta los paisajes pintados parecieran celosos.

Falta de ascensor

Nuestra estancia fue maravillosa. La habitación tenía un jacuzzi que nos permitió relajarnos al máximo, y las vistas eran impresionantes. Además, el desayuno fue espectacular, con opciones generosas que superaron nuestras expectativas. La atención del personal fue excepcional. siempre estaban dispuestos a ayudar con una sonrisa y a darnos recomendaciones sobre los mejores lugares para comer y explorar en las cercanías.

Sin embargo, la falta de aire acondicionado en la habitación hizo que algunas noches fueran incomodas debido al calor.

La habitación tenía un pequeño jardín que fue ideal para mi perro. La ubicación me pareció excelente, a un paso de la playa de Langre y cerca de Somo para las cenas. Sin embargo, el costo de llevar a mi mascota fue de 15 euros por noche, que me pareció un poco excesivo, especialmente porque no había ni un bol con agua o una cama para él. Además, la televisión no funcionaba y la atención del personal no fue la mejor, ya que la señora que nos recibió no mostró mucho interés. El desayuno era bastante limitado y caro, 9 euros por un servicio que no valía la pena. Definitivamente, el lugar tiene potencial, pero hay detalles que deberían mejorar para justificar el precio.

La habitación contaba con un pequeño jardín que fue ideal para mi perro, y la ubicación es excelente, muy cerca de la playa. Sin embargo, la televisión no funcionaba y el desayuno era limitado y algo caro, lo que debe mejorar para una mejor experiencia. En general, el lugar tiene potencial, pero necesita atención en los detalles.

el jacuzzi es una pasada, pero hacía un poco de calor en la habitación.